La descripción no suena muy diferente: otra banda sueca que consiguió cierta notoriedad con su debut y que presenta ahora su candidatura para quedarse fuera del olvido en el saturado panorama europeo con su segundo trabajo.
Eso sí, Enforcer han dado este paso con bastante más acierto que la mayoría. Han tardado poco en volver a dar noticias, y han sabido reciclarse para un disco con mayores pretensiones y extensión de mercado.
Claro, para su primer trabajo estuvo muy bien ese derroche de speed metal de antigua escuela que reunía varias influencias de corte ochentero (muchos notaron especialmente las de los primeros años de Iron Maiden y Blind Guardian) en una explosión de sonido directo y, como dicen algunos, “underground”. Pero apostar por algo así de nuevo hubiera eliminado la sorpresa, puesto demasiado fácil la comparación con ese primer producto en unos términos en los que aquel, por primerizo, sería inevitablemente más fresco y rebosante de actitud, y eliminado buena parte de las miras de los seguidores del metal europeo en un sentido más amplio. Y eso no quiere decir que hayan cambiado totalmente de registro.
El grupo parece demostrar su personalidad en todo momento y además deja espacio para esos latigazos speedicos en su nuevo álbum. Pero los reparte de una manera más inteligente, dando variedad a un conjunto con mayor peso del sonido no tan acelerado del heavy metal (del ochentero, por supuesto, muy de influencia NWOBHM) por encima del speed más puro. Dentro de eso, los Iron Maiden de los primeros ochenta, los de Paul Di’Anno, se descubren como los auténticos maestros de estos jóvenes nórdicos.
Es una buena apuesta, y está claro que esta vez han jugado fuerte desde que se ve la portada y se recuerda la del anterior y primer disco. Esperemos que les salga ganadora.
martes, 25 de mayo de 2010
2010 - Y&T - Facemelter
Ya nos estamos acostumbrando este año a que vengan los veteranos a recordarnos por qué nos gusta esto del heavy rock. Scorpions, RATT o KEEL han vuelto estos meses a dar alegrías y con un disco de Y&T anunciado, por supuesto, la cosa –a pesar del tiempo que llevábamos sin tener material nuevo de su parte- no podía desentonar.
“Facemelter” es el primer disco de estudio de Meniketti y sus chicos desde 1997, y por si alguien pensaba que la larga ausencia se debía a que poco le quedaba ya por decir al veterano músico de California, presenta un largo listado de temas sin desperdicio y con la marca siempre presente de su autor. Es más, puede que por haber podido reunir ese material con más tiempo del acostumbrado se trate de uno de los discos más completos y bien trabajados de su discografía (lo que es mucho decir), a la vez que poseedor de auténticos hits potenciales como la impresionante “I Want Your Money”, ese potente “On With The Show” que abre el disco de la mejor manera posible o este “I’m Coming Home” que ha servido de primer single.
Sin lugar para la decepción de cualquier amante de su música anterior (y la única posible pega de ver cómo la voz de Meniketti se ha ido gastando, a pesar de que con su perfecto manejo en estos nuevos registros consiga utilizarla para hacerla más personal), un atemporal discazo de heavy rock, del de siempre, que vale la pena no perderse. Quién sabe hasta cuándo vamos a tener que esperar para el siguiente.
“Facemelter” es el primer disco de estudio de Meniketti y sus chicos desde 1997, y por si alguien pensaba que la larga ausencia se debía a que poco le quedaba ya por decir al veterano músico de California, presenta un largo listado de temas sin desperdicio y con la marca siempre presente de su autor. Es más, puede que por haber podido reunir ese material con más tiempo del acostumbrado se trate de uno de los discos más completos y bien trabajados de su discografía (lo que es mucho decir), a la vez que poseedor de auténticos hits potenciales como la impresionante “I Want Your Money”, ese potente “On With The Show” que abre el disco de la mejor manera posible o este “I’m Coming Home” que ha servido de primer single.
Sin lugar para la decepción de cualquier amante de su música anterior (y la única posible pega de ver cómo la voz de Meniketti se ha ido gastando, a pesar de que con su perfecto manejo en estos nuevos registros consiga utilizarla para hacerla más personal), un atemporal discazo de heavy rock, del de siempre, que vale la pena no perderse. Quién sabe hasta cuándo vamos a tener que esperar para el siguiente.
domingo, 16 de mayo de 2010
Dio ha muerto
No se suelen comentar noticias en este blog, que queda casi exclusivamente para las reseñas de la música que nos gusta. Pero es que acaba de morir una parte muy importante de esa música. Este es el comunicado oficial de la mujer de Dio, que nos ha impactado a todos confirmando que el genial músico no ha podido superar el cáncer que padecía:
"Hoy mi corazón está roto, Ronnie falleció a las 7:45 del 16 de mayo. Muchos, muchos amigos y familiares pudieron dar su propia despedida antes de que pacíficamente falleciera. Ronnie sabía cuánto le quería todo el mundo. Apreciamos el amor y el apoyo que todos vosotros nos habéis dado. Por favor, dadnos unos días de privacidad para soportar esta terrible pérdida. Por favor, sabed que él os quería a todos y que su música vivirá por siempre".
Descanse en paz Ronnie.
Desde aquí, un pequeño homenaje recordándolo en ese proyecto solidario en el que Dio involucró a muchos de sus amigos de esta música hace ya muchos años:
"Hoy mi corazón está roto, Ronnie falleció a las 7:45 del 16 de mayo. Muchos, muchos amigos y familiares pudieron dar su propia despedida antes de que pacíficamente falleciera. Ronnie sabía cuánto le quería todo el mundo. Apreciamos el amor y el apoyo que todos vosotros nos habéis dado. Por favor, dadnos unos días de privacidad para soportar esta terrible pérdida. Por favor, sabed que él os quería a todos y que su música vivirá por siempre".
Descanse en paz Ronnie.
Desde aquí, un pequeño homenaje recordándolo en ese proyecto solidario en el que Dio involucró a muchos de sus amigos de esta música hace ya muchos años:
martes, 11 de mayo de 2010
1994 - Mötley Crüe - Motley Crue
Mötley Crüe había arrasado medio mundo (y buena parte de la salud de sus miembros) con el rotundo éxito de un "Dr. Feelgood" que, por fin, ponía la guinda a su carrera con un número uno. Se habían colocado en una posición tal que hasta el recopilatorio del '91 había llegado a colocarse en el número 2 del Billboard. Pero las cosas cambian y, como casi siempre que se dice eso, pueden hacerlo a peor. En este caso, las condiciones para que se diera algo así estaban perfectamente dispuestas: Por un lado, una banda endiosada poniéndose a trabajar en un álbum nuevo tras varios años más llenos de halagos y fiesta que de trabajo duro. Por otro lado, un momento de cambio radical del panorama musical. Y en medio, varios egos fuertes que satisfacer y predispuestos a la pelea.
En la de Mötley Crüe, fue Vince Neil el que acabó perdiendo. Y su salida de la banda dejó al gigante sin su carismático vocalista y con Nikki Sixx como líder sin discusión. No es de extrañar, entonces, que fuera éste el que no tardara en encontrar el sustituto en un tipo, J.Corabi (entonces vocalista de The Scream), con el que "casualmente" hacía un tiempo contactaba para compartir admiraciones y posibles colaboraciones. El peso de Corabi, eso sí, resultó mayor de lo que se podía esperar de un recién llegado y acabó colaborando en la composición de todos los temas del nuevo disco. Eso, por consiguiente, se sumó a la dirección por la que Sixx quería llevar a su grupo en aquellos nuevos 90s, llevando el resultado un paso más lejos de lo que venían haciendo anteriormente.
Registro diferente para las voces, orientación más seria en las letras (no hace falta decir que Corabi no resultó ser otro llamativo Neil que apostara por el "sexo, drogas y rock n roll") y un sonido más denso y pesado que se apoyaba en otra brillante producción de Bob Rock (por lo menos a la altura de "Dr. Feelgood" en el primer puesto de las producciones "Crüe", si no claramente la primera).
Todo eso suele ser mucho cambio para un salto de un solo disco de estudio (aunque sea también de cinco años) y aunque la larga espera hizo que la acogida fuera tan efusiva como para entrar directamente al nº 7 del Billboard, pronto las ventas se desinflaron por debajo de los trabajos de los 80s.
Pero tampoco imaginemos de más. Temas como "Poison Apples", la tremenda "Welcome To The Numb" o "Driftaway" (una de sus mejores baladas de siempre) son perfectamente reconocibles en su carácter continuista -tanto que no cuesta imaginarlos con la voz de Vince Neil- y hubieran sido perfectos y exitosos hits 100% Mötley Crüe en otra época. "Hammered" o "Smoke The Sky" (de lo más potente de su repertorio) introducen un sonido algo más pesado y poderoso pero no por eso dejan de grandes piezas de hard/heavy rock que deberían haber tenido mejor suerte entre su público de siempre. "Misunderstood", cerca o lejos de su estilo anterior, es claramente uno de los temas más redondos de su discografía. Y en general, todo el disco (también en sus partes más "noventeras") representa un esfuerzo considerable y más que bien aprovechado, del que incluso muchos diríamos que, más aún prescindiendo de un par de momentos, puede ser uno de sus trabajos más conseguidos. Pero quizá exageraron la sensación de cambio colocando, significativamente, algunos de los cortes de mayor gusto "noventero" justo al principio. O quizá, sencillamente, ya no era tan buen momento comercial para ellos.
A estas alturas, eso sí, hemos superado mucho y que sea "el disco de Mötley Crüe sin Vince Neil" o un disco diferente a sus clásicos anteriores no nos debería asustar mucho. ¿Es buen momento para recuperarlo? Bueno, si se hace, por lo menos sabemos que no será un momento perdido.
En la de Mötley Crüe, fue Vince Neil el que acabó perdiendo. Y su salida de la banda dejó al gigante sin su carismático vocalista y con Nikki Sixx como líder sin discusión. No es de extrañar, entonces, que fuera éste el que no tardara en encontrar el sustituto en un tipo, J.Corabi (entonces vocalista de The Scream), con el que "casualmente" hacía un tiempo contactaba para compartir admiraciones y posibles colaboraciones. El peso de Corabi, eso sí, resultó mayor de lo que se podía esperar de un recién llegado y acabó colaborando en la composición de todos los temas del nuevo disco. Eso, por consiguiente, se sumó a la dirección por la que Sixx quería llevar a su grupo en aquellos nuevos 90s, llevando el resultado un paso más lejos de lo que venían haciendo anteriormente.
Registro diferente para las voces, orientación más seria en las letras (no hace falta decir que Corabi no resultó ser otro llamativo Neil que apostara por el "sexo, drogas y rock n roll") y un sonido más denso y pesado que se apoyaba en otra brillante producción de Bob Rock (por lo menos a la altura de "Dr. Feelgood" en el primer puesto de las producciones "Crüe", si no claramente la primera).
Todo eso suele ser mucho cambio para un salto de un solo disco de estudio (aunque sea también de cinco años) y aunque la larga espera hizo que la acogida fuera tan efusiva como para entrar directamente al nº 7 del Billboard, pronto las ventas se desinflaron por debajo de los trabajos de los 80s.
Pero tampoco imaginemos de más. Temas como "Poison Apples", la tremenda "Welcome To The Numb" o "Driftaway" (una de sus mejores baladas de siempre) son perfectamente reconocibles en su carácter continuista -tanto que no cuesta imaginarlos con la voz de Vince Neil- y hubieran sido perfectos y exitosos hits 100% Mötley Crüe en otra época. "Hammered" o "Smoke The Sky" (de lo más potente de su repertorio) introducen un sonido algo más pesado y poderoso pero no por eso dejan de grandes piezas de hard/heavy rock que deberían haber tenido mejor suerte entre su público de siempre. "Misunderstood", cerca o lejos de su estilo anterior, es claramente uno de los temas más redondos de su discografía. Y en general, todo el disco (también en sus partes más "noventeras") representa un esfuerzo considerable y más que bien aprovechado, del que incluso muchos diríamos que, más aún prescindiendo de un par de momentos, puede ser uno de sus trabajos más conseguidos. Pero quizá exageraron la sensación de cambio colocando, significativamente, algunos de los cortes de mayor gusto "noventero" justo al principio. O quizá, sencillamente, ya no era tan buen momento comercial para ellos.
A estas alturas, eso sí, hemos superado mucho y que sea "el disco de Mötley Crüe sin Vince Neil" o un disco diferente a sus clásicos anteriores no nos debería asustar mucho. ¿Es buen momento para recuperarlo? Bueno, si se hace, por lo menos sabemos que no será un momento perdido.
lunes, 3 de mayo de 2010
2010 - Meat Loaf - Hang Cool Teddy Bear
“Hang Cool Teddy Bear” es el nuevo disco de Meat Loaf, y aunque esta vez no tenga al genial Jim Steinman entre los compositores -y aunque eso se note, por mucho que algunos temas traten de seguir con su estilo épico y grandilocuente y por mucho que la lista de compositores de los créditos se llene de nombre ilustres- y si bien esta vez se abre a recoger todo tipo de influencias del mainstream americano actual -y que puede que eso lleve al disco a una extensión y diversidad quizá desmesurada que se puede añadir en “el debe” al desencanto del que quisiera escuchar al Meat Loaf de siempre- eso es siempre una buena noticia.
Lo es porque siempre es un gusto escuchar las interpretaciones (las que puede hacer a día de hoy también) de uno de los mejores vocalistas de la historia del rock, y sobre todo lo es porque después de haber dicho tantas veces que éste (por los anteriores) sería su último trabajo o que tal sería su último concierto -y casi siempre por su parecía que preocupante salud- parece que la veterana estrella de los “Bat Out Of Hell” es todavía capaz de seguir adelante con ánimo.
No pasará a esa mencionada historia como uno de sus más grandes álbumes, no. Pero por lo menos nos recuerda que este tipo sigue estando ahí y que vale la pena recordarlo.
Hecho con el primer single del disco, mucha suerte para él.
Lo es porque siempre es un gusto escuchar las interpretaciones (las que puede hacer a día de hoy también) de uno de los mejores vocalistas de la historia del rock, y sobre todo lo es porque después de haber dicho tantas veces que éste (por los anteriores) sería su último trabajo o que tal sería su último concierto -y casi siempre por su parecía que preocupante salud- parece que la veterana estrella de los “Bat Out Of Hell” es todavía capaz de seguir adelante con ánimo.
No pasará a esa mencionada historia como uno de sus más grandes álbumes, no. Pero por lo menos nos recuerda que este tipo sigue estando ahí y que vale la pena recordarlo.
Hecho con el primer single del disco, mucha suerte para él.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)